La mayoría de los verbos en español son regulares, sin embargo, hay otros casos en los que las formas de un verbos no sigue el modelo de su conjugación. Son los llamados verbos irregulares.
Los verbos irregulares son los que al conjugarse varía la raíz o las terminaciones propias de la conjugación: 'Yo conducía un coche nuevo, tú condujiste uno antiguo' o 'Yo quepo en la caja, vosotros cabéis en el armario'. - Las formas simples están formadas por una sola palabra: 'Comió, jugaba, correré, etc'.
Dicho de otra forma, un verbo irregular es el que no sigue el modelo de conjugación que le corresponde por la terminación de su infinitivo. Pueden estar alterados todos o algunos de los tiempos verbales, el radical o la desinencia.